Ángeles y Demonios: El arcángel Sariel

El arcángel Sariel, el vigilante incansable.

El significado de su nombre se traduce como: Mandamiento de Dios. En el Talmud es llamado Azrael y se cree que puede ser identificado como Metatrón. Mientras en el Segundo Libro de Enoc Sariel es llamado Samuil. En la astrología el arcángel Sariel es relacionado con el signo Aries. Sariel, es el ángel "encargado de los espíritus de los hombres que pecan". El nombre de Sariel es mencionado al lado de los otros seis arcángeles, "los santos ángeles que vigilan". En babilonia, Sariel es considerado un protector contra las maldiciones de magia. Sariel se muestra como un serafín en la mayoría de las escrituras antiguas en varias religiones que mencionan a los arcángeles.

Es uno de los candidatos a considerar como el “ángel de la muerte”. Es el custodio del cumplimiento de las leyes morales, vigilante de los pecadores para que no escapen a la justicia de Dios. Es guía de las almas dentro del mundo espiritual. Es protector ante maldiciones, hechizos, brujerías, o mal de ojo, en los que se encuentra involucrado cualquier demonio. Tiene el poder de libera a cualquier alma que esté injustamente en el abismo infernal. Es un ángel lleno de virtudes de sabiduría, inteligencia, conocimiento, que, además, posee dones de sanación al igual que el arcángel Rafael. Se sabe que el conocimiento que fue dado a Moisés, se tiene la convicción que fue dado por Sariel a Moisés En la cultura islámica en las que es conocido como Azrael se le considera el ángel de la muerte. Donde también, se le atribuye haber sido el único de los arcángeles que cumplió con llevarle el polvo solicitado por Dios para arrojarlo en las cuatro esquinas del mundo y así, crear a Adán. Por esa causa, Dios le bendijo con la virtud del poder separara el alma o espíritu de los cuerpos del hombre al momento de morir. Se dice que vive en el tercer cielo. Tiene la virtud de contribuir con el control de la desesperación, la ansiedad y la angustia. El arcángel Sariel goza de una gran responsabilidad e importancia, ya que, es el encargado de llevar la causa de los hombres ante Dios. En algunas creencias también se le identifica como el ángel de la muerte, de cualquier manera, su labor siempre está apegada a la más estricta justicia. El arcángel Sariel es la única entidad celestial que posee el permiso de trasladarse entre el cielo y el infierno para el rescate de las almas.

Fue el quien, en compañía de Miguel, Rafael y Gabriel, atestiguó ante Dios toda la injusticia que se cometía en la tierra por parte de los ángeles caídos que al estar en contacto íntimo con las humanas habían concebido una descendencia de gigantes conocidos como «los Nefilim». Todos ellos marcaron la tierra con sus maldades, explotación y violencia. El color de Sariel por naturaleza es el color blanco, símbolo de la pureza y de su alto nivel celestial que le permite tener una proximidad considerable con Dios. Sin embargo, también es posible hacerle peticiones con llamas de color violeta invocando la trasmutación de la maldad o la hechicería provocadas por los demonios, ya que, ese color vibra en sintonía con la transformación y el desprendimiento de procesos o energías negativas. El Arcángel Sariel es presentado con una larga cabellera llena de canas. Sus ojos son de color azul. Su vestimenta también suele ser de color azul con unas mangas bastante largas de color blanco. En algunas costumbres suelen presentarlo como portador de tres pares de alas, lo que significaría que Sariel es un Serafín, ya que, solo ellos son portadores de esa cantidad de alas. En otras versiones se cree que Sariel pudiese ser el propio Metatrón, por lo tanto, sobre su fisionomía se dice que tiene cuatro rostros, lo que simboliza los cuatro puntos cardinales de la tierra. Incluso, en las representaciones más mitológicas se alega que posee 4000 alas, y que su cuerpo está cubierto de ojos y lenguas. También se le atribuye a su imagen el ser portador de un gran libro, que representa la labor que realiza al llevar la cuenta de todos los seres humanos que viven en la tierra. Mientras que en su mano izquierda sostiene un cayado.

Existe una leyenda que dice que el arcángel Sariel pertenece al grupo de los ángeles caídos, y que es descendiente de Lilith y Samael. Además, que su delicado rostro se enciende como una llama fuego en medio de la noche de Iom Kipur, esto se relaciona con el día del arrepentimiento de corazón en la cultura judía. El arcángel Sariel hace sus apariciones en compañía de 130 soldados cuyas caras también están cubiertas de fuego, motivado a la radiación de luz que este arcángel les emana, al igual que lo hace con todos los que realizan invocaciones a su nombre solicitando su ayuda. Se dice que cada 13000 años se le encomienda la misión de ser el ángel guardián que ampara a cualquier persona que es seleccionada al azar, y que por tal razón será bienaventurada en la tierra. ¿Cómo se atiende? Se atiende en lugares totalmente limpios, donde predomine el color blanco. Al igual que el resto de los arcángeles con el uso de inciensos con aromas frutales y florales dulces, en especial con jazmín y lavanda. Se le pueden colocar para su invocación copas de cristal con agua fresca, velas y flores blancas. ¿Qué se le pide al arcángel Sariel? Al arcángel Sariel se le considera un maestro para los hombres, gracias a su labor al enseñarles el calendario lunar o las normas de higiene. Además, al representar una de las siete energías esenciales, se le solicita su intervención en los siguientes asuntos: Para protegerse de maldiciones, hechizos, y guerras de brujería en las que han sido utilizados los demonios contra las personas, o el mal han sido generados por voluntad de dichos seres. Para obtener la concentración, la calma, la tolerancia y la capacidad para el entendimiento. Para la sanación de enfermedades tanto físicas como espirituales. Para la solución de situaciones en las que se es víctima de injusticias. Para luchar contra padecimientos de ansiedad y la depresión. Para que sea el guía y propicie el perdón de los pecados y la redención de las almas que acaban de fallecer.

En el Judaísmo se le considera un ángel exterminador que actúa como defensor de Dios, portador de una hermosa espada con la que cubre a Jerusalén. Además, es el jefe del coro de las potestades. Sin embargo en el Cristianismo no se le atribuye a Sariel las labores relacionadas con respecto a las almas de los difunto, más bien esas funciones son delegadas al Arcángel San Miguel. En el Islam se describe a Sariel como un ángel celestial cuya función es cumplir a cabalidad los mandatos de Dios, y para ejecutarlas “no guarda misericordia ni piedad alguna”. El día del arcángel Sariel es el 29 de Septiembre. El arcángel Sariel se manifiesta durante sus invocaciones a través de una energía cálida que se percibe en el cuerpo del oficiante. También a través de visualizaciones de destellos de luces brancas y brillantes o mediante sueños reveladores. Para que su presencia sea percibida es necesario que la persona que desea conectar con él mantenga una conducta llena de valores y buenas costumbres, de lo contrario la entidad celestial no se acercará a ella, a no ser que experimente un arrepentimiento verdadero. ¿Cómo Invocar al arcángel Sariel? Para invocar al arcángel Sariel lo más recomendable es ubicarse en un espacio totalmente limpio, lo ideal sería que en esa habitación predomine el color blanco de ser posible. Allí se establecerá una conexión energética con el ángel, mediante una profunda meditación en la que se visualizará con los ojos cerrados al arcángel, llamándolo para solicitar su ayuda en el asunto que se desea solucionar. Esta invocación se puede realizar con la ayuda de algún otro ritual sin problema alguno. Cuando se invoca al arcángel Sariel es necesario poner la mente y el corazón en sintonía con la confianza y la fe que él acudirá al llamado, pues la mínima duda hará que la energía se distorsione y la conexión sea mucho más difícil de alcanzar. También es importante recordar que la naturaleza espiritual de Sariel está fundamentada en la justicia, de hecho, es el representante de la justicia Divina, por lo tanto, las peticiones que se le realicen deben ser en base a causas que respondan a valores como: la verdad, la honestidad, la lealtad, la tolerancia y la búsqueda de la paciencia, la calma y la resolución de conflictos en los que nosotros no hemos sido los causantes de la situación. Ritual para protegerse de brujerías con el arcángel sariel Para comenzar este este ritual es necesario invocar previamente la presencia del arcángel Sariel. Esto se realizará colocando sobre una mesa preparada con un mantel blanco: una pirámide, una copa de cristal con agua fresca, un plato con un velón color violeta. Una vez encendido el velón se rezará la siguiente oración: Con la bendición de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, En esta hora y en este momento imploro la Divina presencia del Arcángel Sariel, Yo, una humilde criatura, imploro tu misericordia para obtener tu auxilio ante esta causa que aqueja tanto mi mundo físico como mundo espiritual. Que así sea, que su bondadosa majestad trasmute con esta llama violeta toda hechicería, brujería, maldad y demonio alojado en mi mundo físico y espiritual, para que la voluntad y el amor de Dios sea quién reine por los siglos de los siglos. Amén». Luego de esta invocación, se recomienda quedarse meditando en el lugar visualizando que la llama violeta cubre todo el cuerpo del oficiante, durante el mayor tiempo posible. Oración del arcángel Sariel A este arcángel se le ora sobre todo cuando se tiene un gran deseo de justicia o de liberarse de la maldad ejercida por otros, cuando se busca sanar espiritual o físicamente y por lo tanto la oración debe ser realizada con la mayor solemnidad y seriedad posible.

«Maravilloso Arcángel Sariel, hoy clamo por tu divina presencia. Atiende por favor mi súplica y acude a mi auxilio, Obra en mi vida como una balanza exacta. Equilibra mis energías, mis situaciones y mi vida. Para lograr alcanzar la solución de los conflictos que hoy me aquejan (se hace la petición). Amén».

Oración para quitar hechizos y brujerías con el arcángel sariel:

«Con la bendición del gran poder de Dios invoco la protección del Arcángel Sariel, Para que con tu llama luminosa y tu fortaleza espiritual me libres, sanes, y trasmutes todo tipo de maldición, hechicería, brujería, y demonio virado en mi contra. Que no exista ataque físico ni espiritual de mis enemigos que sobre mí que pueda tener éxito, Y que siempre cuente con tu presencia, como mi guía y justiciero protector. Gracias, gracias, gracias. Amén y que así sea».